| El Rey Felipe ha aprovechado el fin de semana para escaparse al Pirineo y disfrutar de una de sus máximas pasiones, el esquí. Acompañado por un nutrido grupo de amigos, el Rey ha pasado unos días de descanso antes de regresar a Madrid. Sin la compañía de la Reina Letizia ni de sus hijas, Don Felipe ha disfrutado esquiando en las pistas de Baqueira Beret. Antes de retomar su agenda hoy en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid, el Rey ha pasado dos días de lo más relajado y divertido.