El abogado de Willy Toledo, Endika Zulueta, aseguró ayer que con este caso judicial por ofensas religiosas contra el actor se está "criminalizando" la libertad de expresión "como en tiempos de la Santa Inquisición". Un juzgado de Madrid emitió el martes una orden de detención contra Toledo por no acudir a declarar ante la justicia tras la denuncia de Abogados Cristianos y de la Fiscalía. Zulueta admitió que esta orden es "un acto ajustado a derecho". No obstante, entiende que "debe llamar a la reflexión" el hecho de que, "en la España del siglo XXI, en un Estado constitucionalmente aconfesional, la Fiscalia interponga denuncia contra una persona por escribir en Internet 'me cago en Dios'".

"Que la policía investigue todo su historial de mensajes en la Red; y que un juzgado ordene abrir diligencias, y cite a esta persona por considerar que escribir eso podría implicar la comisión de un delito... como en tiempos de la Santa Inquisición", lamentó. Así, para Zulueta, con este caso se "está criminalizando" la libertad de expresión.

Por su parte, la Asociación Española de Abogados Cristianos que denunció a Toledo por unos comentarios que consideraban que "vejaban los sentimientos religiosos", alegó que la orden de detención contra el actor es por obstrucción a la justicia y no por un tema de libertad de expresión. En declaraciones en TVE recogidas por Europa Press, la presidenta de esta asociación, Polonia Castellanos, defendió que desde su organización "no se persigue a nadie" y simplemente, según dijo, hacen uso de sus derechos. No obstante, señaló que le parece "peligroso" que no se pongan límites a la libertad de expresión y asegura que, en su opinión, los comentarios sobre los cristianos se "miden con un doble rasero" respecto a otros colectivos.