Una de las 'abuelas' de Galicia festeja sus 107 años en Vigo. Aunque se muestra ajena al secreto de la longevidad -si lo hubiera- Purificación Cortés Feijóo, acepta con naturalidad el avance de sus años vida, que ya se escriben con tres dígitos, y aún sopla pidiendo deseos. El último de los que vio cumplidos, ver a su familia unida en la celebración de su 107 aniversario, que celebró ayer.

Pura, como la conocen sus familiares, vino al mundo un 31 de mayo en Gresuce de Crespos (una localidad ubicada en el municipio ourensano de Padrenda) pero vive en el barrio vigués de Coia desde que cumplió los 90 años. Aficionada a las series televisivas de acción, aún suele pasear por el barrio cuando hace buen día.

Unas quince personas de cuatros generaciones, reunidas en un conocido restaurante del mirador de A Guía, en Teis, cantaron ayer el cumpleaños feliz por ella y por otra de las mujeres de la familia que también cumplió en fechas próximas: su hija Carmen Novoa, que celebraba su 67 cumpleaños. El evento reunió también a familia política, a tres nietos y a cuatro bisnietos. Pura aún tiene dos nietos más, pero están fuera de Galicia y no pudieron acudir al evento.

"Ya nos gustaría saber cuál es el secreto de la longevidad", sonríe su nieto Ángel Fernández, que recuerda que la fiesta del centenario de la 'abuela' gallega ya se celebró por todo lo alto, así como el 105. Pero hoy, totalmente lúcida y provista de silla de ruedas, asegura que "está muy contenta aquí". Y en su fiesta, pudo degustar uno de sus platos preferidos, el bacalao a la plancha, y un poco de tarta de hojaldre con crema. Es que 107 no se cumplen todos los días.