Una película española, pero dirigida por un iraní, Asghar Farhadi, y que inauguró ayer el Festival de Cannes, es la que ha hecho que Javier Bardem haya regresado al cine en español, algo que el actor se toma con humor, pero con una cierta añoranza. "Hace falta que vengan los directores extranjeros, de fuera, como Iñárritu, Woody Allen o un iraní, como Farhadi, para que me hagan hablar español. ¡A ver si algún día me llama un director español!", bromeó Bardem.