La actriz israelo-estadounidense Natalie Portman justificó su decisión de no ir a Israel para recibir un premio al afirmar que no quiere ser asociada al primer ministro Benjamin Netanyahu, que debía hablar durante la ceremonia. La Genesis Prize Foundation anuló la ceremonia porque la actriz de 36 años, nacida en Jerusalén, decidió no viajar por acontecimientos recientes "extremadamente penosos" vinculados a Israel, que le impedían "participar con la conciencia libre".