París abre hoy una semana de la moda llena de desafíos: Dior, Saint Laurent y Lanvin presentan el trabajo de sus nuevos diseñadores tras un año especialmente complicado. Además, entre los 91 desfiles de la temporada primavera-verano 2017, la cantante Rihanna mostrará su segunda colección para Puma.

Dior vive un momento histórico tras el nombramiento de la italiana Maria Grazia Chiuri, la primera mujer que toma las riendas del diseño de la maison francesa, fundada en los años 40.

Chiuri se hizo un nombre en Valentino, donde trabajó prácticamente toda su carrera junto a Pier Paolo Piccioli -que se ha quedado solo al frente de la casa-, primero realizando los accesorios y desde 2009 las colecciones de mujer, hombre y Alta Costura.

Para Dior también ha sido una época difícil desde que John Galliano fuera despedido en 2011 y con Chiuri, en el desfile de este viernes, podría ser el momento ideal para marcar el comienzo de una nueva etapa algo más estable.

Sus dramáticos diseños fueron reemplazados por la sobriedad con aires modernos del belga Raf Simons, que en 2015 prefirió no renovar su contrato y dedicarse a su propia firma.

Simons aseguró sentirse agotado por el ritmo de trabajo y la presión de deber crear cuatro colecciones al año, aunque sorprendentemente fue fichado en agosto como diseñador en Calvin Klein que quiere establecer una nueva estrategia de diseño y mercado.

Antes, hoy mismo, en el penúltimo desfile de la jornada, se podrá ver el trabajo en Saint Laurent del belga Anthony Vaccarello, quien ha tomado el testigo del polémico y admirado Hedi Slimane, que había transformado toda la estética de la firma francesa e incluso trasladado el cuartel general a Los Ángeles.

Este gesto encajaba en la estética rockera, atrevida y andrógina que Slimane eligió para la nueva era de Saint Laurent y le funcionó: las ventas se dispararon, la clientela rejuveneció y la marca se convirtió por momentos en un icono publicitario usando de modelos a los cantantes Courtney Love o Marilyn Manson, entre otros.

Vaccarello, de 36 años, trabajaba desde 2009 en su propia marca bautizada con su nombre, tras haber pasado por las firmas italianas Fendi y Versus Versace.

La histórica maison confía en que el belga sepa adaptar su técnicas de costura, "la precisión de su corte" y sus influencias y referencias, que "recuerdan con fuerza el espíritu de Yves Saint Laurent", según describió el conglomerado Kering, en el que se engloba la marca, en su nombramiento el pasado mes de abril.

Y Lanvin da la bienvenida a la francesa Boucha Jarrar, procedente del universo de la Alta Costura, para sustituir al mítico Alber Elbaz, que dejó el que había sido su hogar durante catorce años en octubre de 2015.

A la casa francesa le ha resultado duro encontrar un sustituto ya que Elbaz es una figura simbólica del diseño y un personaje entrañable, muy amado en el mundo de la moda.La dueña de Lanvin, la empresaria Shaw-Lan Wang, residente en Taiwán, ha confiado en Jarrar, que antes trabajó en Balenciaga y Christian Lacroix.

También el miércoles será el turno de una propuesta muy comercial, como promete ser la colección que la cantante Rihana ha concebido para la firma deportiva Puma.