| El Gobierno francés se defendió ayer de las críticas recibidas tras la entrega el viernes de la medalla de la orden nacional de la legión de honor al príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammed ben Nayef, alegando que es una tradición diplomática y que reconoce en ese caso su rol mediador en Siria. "No hubo nada solemne. A veces hay ciertas tradiciones diplomáticas que pueden sorprender", indicó el ministro de Exteriores.