Ambiente griego: sencillo y relajante

En Grecia, hay regiones en las que el blanco y el azul junto con los techos abovedados son todo un clásico, y otras donde el blanco se combina con el terracota o colores derivados de la tierra. En todo caso, nunca se pierde de vista la geometría, tanto en la construcción como en la decoración de las casas. Las curvas se utilizan para los pórticos y, en el interior, se aprovechan al máximo para suavizar y crear un ambiente tranquilo y relajante.

La decoración es sencilla, con mobiliario de líneas simples. En los interiores predomina el color blanco, al igual que en las piedras del sur de Grecia y en la sal del mar (elemento importante en la vida griega). Otro color que destaca es el azul, en sus diversos tonos, evocando el mar Egeo. El blanco y el azul se combinan con otros colores, para aportar algún detalle, pero siempre derivados de la tierra, como los tonos amarillos.

La vegetación es otra de sus notas, pero nunca en abundancia y siempre llena de color. Y la cerámica también suele estar presente en detalles decorativos o en espacios de almacenamiento aunque, en general, los revestimientos son lisos.