La ola de calor y la subida del precio de la energía ha provocado que las reservas de hielo en España se encuentren en niveles bajos. Una escasez que está afectando tanto a los empresarios de la hostelería como a los consumidores.

Los supermercados se han visto obligados a limitar sus ventas a los consumidores. Si bien es cierto que es posible hacer hielo en casa con una cubitera, este no suele ser tan grueso como el hielo fabricado. Por eso aquí te dejamos un truco muy sencillo con el que podrás conseguir unos hielos como los que te sirven en los bares, más grandes y que se derriten más lento.

Para que tu hielo quede perfecto y dure más tiempo, utiliza agua mineral, mejor aún si es de mineralización débil, ya que así estaremos obviando esas impurezas que hay en el agua del grifo. Uno de los motivos por el cual el hielo de casa se derrite más rápido es por el nivel de burbujas que hay en su interior. Si hierves el agua justo antes de congelarla y luego la introduces en el congelador cuando se encuentre a 70ºC el cubito será más compacto.

Por si no dispones de cubiteras en casa, existen otras alternativas. Puedes probar a hacer hielo con globos de agua, los introduces en la nevera y luego solo deberás pinchar el globo. Ten cuidado con el tamaño para que luego te entre en el vaso.

Otro método muy curioso es hacer un vaso de hielo. Llena un vaso de agua e introduce otro de plástico en su interior y luego mete ambos en el congelador. Después solo tendrás que retirar el de plástico. Si tienes vasos de chupitos en casa también puedes llenarlos de agua e introducirlos en el congelador, así te quedarán unos hielos muy parecidos a los que se compran en las tiendas.