Son muchos los famosos que suben fotos a sus redes sociales y se convierten en el objetivo de los haters, sin embargo otras muchas veces son víctimas de sus propias meteduras de pata. La última en caer en su propia trampa ha sido la cantante Ana Guerra.

La 'triunfita' ha compartido una foto en su cuenta de Instagram en la que aparece de espaldas sentada frente a un piano blanco, aparentemente tocándolo, en un entorno idílico blanco a juego con el sexy vestido de la canaria, también en blanco con la espalda al descubierto y con una amplia raja que deja al descubierto sus piernas.

Todo perfecto sino fuese porque la cantante no solo no está tocando el piano realmente, sino que ni si quiera se ha molestado en que lo parezca y la tapa del piano está completamente bajada.

Un detalle que sus seguidores no han pasado por alto y se lo han dejado claro en los comentarios, invitándola incluso a clases particulares de piano y convirtiendo la imagen rápidamente en viral tanto en Instagram como en Twitter.