El jefe de Pronósticos del Instituto de Meteorología cubano, José Rubiera, indicó a Efe que una Comisión de la OMM se encargó de dictaminar el récord mundial registrado por la estación meteorológica de Paso Real, en la provincia occidental de Pinar del Río.

Rubiera señaló que esa racha de vientos llegó a inutilizar hasta los instrumentos de medición de la estación de Paso Real, cuando atravesó esa zona el "Gustav", un huracán de categoría cuatro en la escala Saffir Simpson, de un máximo de cinco.

De acuerdo a esta escala, un huracán de categoría cuatro se define por mantener vientos máximos sostenidos de entre 210 y 249 kilómetros por hora.

El experto explicó en septiembre, tras el paso de ese ciclón por Cuba (el 30 de agosto de 2008), que el viento más fuerte del que se tiene registro hasta ahora corresponde a una tormenta invernal en New Hampshire (EE.UU), en 1934, que dejó rachas de 369,6 kilómetros por hora.

Sin embargo, en el caso de los huracanes los vientos más fuertes de los que hay referencia corresponden a los 286 kilómetros por hora de un ciclón que pasó por México en 1953.

Además recordó que en la historiografía de los huracanes que han azotado la isla solo le antecede el registro de una ráfaga de vientos máxima de 262 kilómetros por hora, señalada durante el azote del huracán "San Lucas" por la Habana en el año 1944.

El paso de los huracanes "Gustav", "Ike" y "Paloma" durante la temporada de 2008 dejaron daños en Cuba por valor de 10.000 millones de dólares.

Sobre la próxima temporada de ciclones en el Océano Atlántico, que comenzará el próximo 1 de junio, Rubiera solo indicó que se presume que será "activa" y prefirió subrayar que su tesis de que "siempre hay que estar preparados" y tener la "maquinaria engrasada" para evitar sobre todo la pérdida de vidas humanas.