Las cuatro tortugas liberadas, especie catalogada en peligro de extinción, han sido recuperadas en el Centro de Recuperación de Fauna de El Saler y el Oceanográfico de Valencia, al quedar dos de ellas atrapadas en la malla de un barco de arrastre, otra en el anzuelo de un barco con palangre y la última, al ingerir plásticos.

García Antón ha destacado la importancia de la colaboración ciudadana en el caso de avistamientos de tortugas heridas y ha recordado que se debe llamar al teléfono de emergencias 112 para que "se ponga en marcha un dispositivo que traslade el ejemplar herido lo antes posible al Centro de Recuperación de Fauna".

En el acto de reintroducción de los cuatro ejemplares, que ha contado con la presencia de varios centenares de bañistas, han participado además del conseller, el alcalde de Torrevieja, Pedro Hernández Mateo y la directora del Parque Natural de las Lagunas de Torrevieja y la Mata, Concepción Torres, entre otros.

El Centro de Recuperación de Fauna de El Saler ha acogido más de 300 tortugas bobas, de las que el 85 por ciento han sido reintroducidas en el mar, han informado fuentes de Medio Ambiente, que han destacado que en los tres primeros meses de 2009 se han recogido 42 ejemplares, la mayor cifra desde 1991.

Por otro lado, García Antón, al ser preguntado por los periodistas, ha asegurado que es el Ministerio de Medio Ambiente el que "no debe querer terminar" el proyecto de la desaladora de Torrevieja, que "todavía no cuenta con la Autorización Ambiental Integrada".

Asimismo, el conseller ha asegurado que el gobierno central "no quiere terminar el proyecto", porque "no saben cómo abastecerlo de energía eléctrica, ni quién va utilizar esa agua, ni su precio".