La llegada de Tuan Tuan y Yuan Yuan, nombres que unidos en chino mandarín significan "unión" y simbolizan el deseo chino de unificación con la isla, despertó una fuerte controversia política.

Los osos llegaron al Aeropuerto Internacional Taoyuan procedentes de Chengdu, capital de la provincia china de Sichuan, en un vuelo especial de la taiwanesa EVA Airways, y fueron trasladados inmediatamente al Zoológico de Taipei.

Según la agencia china Xinhua, su último desayuno en territorio chino estuvo compuesto de zanahorias y bollos de maíz, en vez del bambú habitual.

"Los pandas estarán al menos un mes en cuarentena y esperamos que puedan debutar el 29 de enero, durante las festividades del Año Nuevo Chino, que cae en el 26 de ese mes", dijo el director del Zoológico de Taipei, Jason Yeh.

Las autoridades del zoológico esperan que los plantígrados atraigan unos seis millones anuales de visitantes.

La Municipalidad de Taipei, controlada por el gobernante Partido Kuomintang (KMT), ha gastado más de 9,25 millones de dólares en instalaciones que permiten la visita diaria de 30.000 personas.

El Zoológico de Taipei dedicará 25 empleados y un presupuesto de más de 330.000 dólares para el mantenimiento y alimentación de los pandas, albergados en un amplio jardín al aire libre, con puente incluido, y dormitorio con aire acondicionado.

Los pandas fueron regalados en el 2005 por el presidente chino, Hu Jintao, al entonces jefe del Partido Kuomintang (KMT), Lien Chan, pero el gobierno independentista de la época bloqueó su arribo.

Los independentistas preferían que se quedasen en su propio hábitat y se oponían a que China los utilizase como un instrumento político.

El punto más peliagudo para el independentista Partido Demócrata Progresista (PDP) era evitar que en los documentos de transferencia, exigidos por la Convención de Comercio Internacional en Especies de Animales y Plantas en Peligro de Extinción, se diese la impresión de que Taiwán era parte de China.

La oposición taiwanesa sigue considerando el regalo chino como una trampa propagandística.

"Este regalo es una trampa política que busca dar la falsa impresión de que Taiwán es parte de China y cubrir la amenaza bélica de los más de mil misiles que apuntan a la isla", declaró el portavoz del PDP, Cheng Wen-tsang.

Con la llegada al poder del presidente Ma Ying-jeou, del KMT, en mayo del 2008, las razones medioambientales y políticas en contra de la llegada de los osos desaparecieron.

En los documentos de envío, para evitar los nombres oficiales de China y Taiwán, se utilizó como origen "Chengdu" y como destino "Taipei Taiwán", de modo que China lo consideró un envío interno y la isla, una transacción entre los dos lados del Estrecho.

A cambio de los dos osos, Taiwán donará a China un ciervo y una cabra nativas de la isla, que hasta la fecha sólo se encontraban en su territorio.

Desde 1957, fecha en que Pekín comenzó a regalar pandas al extranjero, China los ha enviado a nueve países: Alemania, Austria, Corea del Norte, España, EEUU, Japón, México, Tailandia y la ex Unión Soviética.

El oso panda, un animal nativo de China, con una expectativa de vida de 12 años, de los que hay unos mil en libertad y es el símbolo de la organización ecologista internacional WWF desde 1961.