Este gusano, que ya ha sido detectado en algunas poblaciones del norte de Cáceres, mide apenas un milímetro y medio, según Pedro Tomé, portavoz de Izquierda Unida en la institución provincial, que ha sido de quien ha partido esta iniciativa.

El portavoz del equipo de gobierno y vicepresidente primero de la Diputación abulense, Miguel Ángel Sánchez Caro, ha comentado en rueda de prensa que desde la corporación provincial se ha instado al Gobierno regional a que adopte medidas "ante la posibilidad de que este gusano se extienda a Ávila desde Cáceres".

En este contexto, la institución provincial ha pedido a la Junta que "establezca controles que impidan el traslado de este gusano".

Tomé ha hecho hincapié en su peligrosidad, ya que "ha arrasado bosques completos" de Portugal y es capaz de "tumbar en periodos relativamente cortos de tiempo, pinos de más de treinta metros".

El portavoz de IU ha destacado cómo la Junta de Extremadura ha tenido que adoptar una medida que "implica la tala de los pinos en un radio de al menos 50 metros a la redonda a partir del pino infectado, incluyendo todas las plantas susceptibles de poder albergar" este gusano.

Desde su punto de vista, es necesario que tanto la Junta como la Diputación "adopten medidas preventivas inmediatas, antes de que la plaga llegue a la provincia de Ávila", después de causar en Portugal desde 1999 "numerosos estragos medioambientales y socioeconómicos", paralizando una parte de su actividad maderera.