El pasado viernes, el Gobierno autorizó la concesión de un crédito extraordinario de 11.000 millones de euros, a cargo de los Presupuestos de 2008, para crear 300.000 empleos en diferentes sectores, de los que 500 millones estarán destinados para I+D.

Así, Garmendia explicó que, durante los próximos días, se definirá la iniciativa ministerial con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y destacó que será "una propuesta de enfoque absoluto, comprometida y basada en el sector empresarial", que no planteará una regeneración de "empleo masivo", puesto que no se encuentra dentro de las políticas del Ministerio de Ciencia e Innovación (MICINN).

"La idea de las tres apuestas es alinear todas las capacidades del sistema público y actuar en torno a la demanda empresarial. Así, la capacidad empresarial española será la que tirará de la apuesta. Por ello es preciso identificar qué sectores empresariales podrán claramente competir a nivel internacional. No vamos a impulsar ninguna política del ministerio que no tenga visión internacional", comentó.

Además, la titular de Ciencia se comprometió a anunciar "a finales de enero o principios de febrero" cambios en materia de fiscalidad de I+D+i, ya que considera que las deducciones fiscales para aquellas empresas que invierten en políticas de I+D+i "son una exigencia del país".

"Trabajamos de forma intensa con el Ministerio de Economía y Hacienda, y creo que debemos anunciarnos en esta materia. Es una necesidad para poder proyectar el futuro de las inversiones a medio y largo plazo en el sector empresarial", añadió.

Igualmente, Garmendia considera "un excelente dato" el incremento del 13,7 por ciento del gasto en I+D, reflejado en las estadísticas publicadas ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). "Por primera vez se puede hablar de un período de continuidad y estabilidad en la inversión empresarial y pública en materia de I+D", dijo.

INNOVACIÓN, FUENTE DE CRECIMIENTO Y PRODUCTIVIDAD

Por otro lado, señaló que la innovación es "una fuente de crecimiento y mejora de la productividad", siempre medida a través de las ventas y del empleo, según las conclusiones preliminares de un estudio sobre el impacto de la I+D empresarial del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), que todavía no se ha hecho público. De este modo, apuntó que el 2 por ciento del crecimiento de ambas variables -- ventas y empleo --, entre 2004 y 2006, "está inducido por la inversión en innovación".

También, señaló que las pymes con gasto de innovación en 2004 representan por término medio una tasa de crecimiento del empleo al año siguiente (2005-2006), superior en 3,5 puntos porcentuales a las que no realizaron I+D+i, y recalcó el papel asumido por el Gobierno por impulsar la inversión pública en I+D, como "primer paso" para superar una de las barreras históricas que comprometían, de cara al futuro, la competitividad de la economía española.

Además, incidió en que, "gracias a este esfuerzo presupuestario", el sistema nacional de ciencia y tecnología "ha logrado capacidades suficientes" para competir con éxito en el entorno internacional, que serán mayores cuando se acometan las reformas estructurales pendientes del ministerio.

"En un periodo de crisis la recuperación sostenible y sostenida depende de la ciencia y de la innovación. En este momento, invertir en ciencia y tecnología no es una opción sino una necesidad, hoy son cuestión de desarrollo y de bienestar, pero sobre todo cuestión de supervivencia", concluyó.