Así lo ha señalado el coordinador de curso de verano de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) de Mérida, Rafael Pastor.

Los expertos han coincidido en que las políticas tecnológicas deberían ser "más amplias, firmes y decididas" para aprovechar "definitivamente una posibilidad histórica que, si se escapa, no volverán a tener".

En este sentido, el director de la Oficina de Software Libre de la Universidad de La Laguna, Rodrigo Trujillo, ha explicado a Efe que los mecanismos de contratación y relación con la administración pública no garantizan la "autonomía tecnológica", porque no aseguran "la existencia de opciones tecnológicas, que éstas sean conocidas y menos aún que sean accesibles para todas las personas y entidades".

Trujillo ha resaltado que los ciudadanos deben poder escoger "libremente" a sus proveedores tecnológicos porque corresponde al sector público establecer las medidas para garantizar que las opciones "existan y coexistan", en vez de imponer el uso de una tecnología.

En este sentido, ha recordado que así lo ha establecido recientemente la legislación española, por lo que este profesor y matemático canario ha expresado su deseo de que esta situación cambie a medida que se vayan aplicando las nuevas normas.

En la vertiente puramente tecnológica, el profesor de la universidad de Málaga y consultor en gestión de cambios tecnológicos David Santo ha señalado a Efe que el "éxito o el fracaso" de las estrategias para sustituir "sin traumas" unos sistemas informáticos y programas de ordenador por otros más adecuados a las necesidades actuales dependen, principalmente, del desarrollo de las tecnologías de virtualización y de terminales independientes del sistema.

Santo ha explicado que "tras estos nombres esotéricos" la idea que subyace es simplemente la de "desvincular la información de los ordenadores que la gestionan, de los programas que se utilizan para tratarla, y de los sistemas de telecomunicación con que se transmite y se intercambia la información", de forma que, ha añadido, cada persona u organización pueda utilizar los instrumentos tecnológicos que más le convengan en cada momento.

Por su parte, el portavoz de Iniciativa Focus -asociación que promueve el uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) sin exclusiones-, Ramón Ramón, ha indicado a Efe que el reto actual para el sector público es conseguir la integración de servicios mediante sistemas realmente "interoperables", sustentados en formatos, lenguajes y protocolos que sean "estándares y abiertos".

En su opinión, cualquier otro planteamiento equivale a que cada departamento o cada grupo de personas tenga su "sistema de pesos y medidas", lo que, según ha dicho, complica "innecesariamente" el intercambio de información y de servicios.