Además de esta escasa cifra, Nokia pudo saber que más de la mitad no sabía que los móviles podían ser reciclados.
La poca cultura de reciclaje de dispositivos electrónicos es un fenómeno generalizado en todo el mundo, según datos de la encuesta de Nokia, que se realizó en 13 países tan diferentes como Finlandia, Italia, Emiratos Árabes, Brasil o Indonesia. "Si cada uno de los 3.000 millones de personas que en el mundo tienen un móvil reciclase sólo un móvil, podríamos ahorrarnos 240.000 toneladas de materias primas y reducir la emisión de gases con efecto inverandero equivalente a lo que emiten cuatro millones de coches en la carretera", señaló el director de medio ambiente para Nokia Markus Terho, en declaraciones recogidas por Otr/press de un comunicado de la empresa finlandesa.
El 80 por ciento de los componentes de un teléfono Nokia podrían reciclarse, pero esto no llega a producirse porque el móvil nunca llega a algún punto limpio. Esto se corresponde con el estudio de Nokia, que estima que un 44 por ciento de los móviles existentes aún permanecen en los cajones de sus usuarios. Aunque la ignorancia no ha llegado a mayores, al conocerse que sólo un cuatro por ciento de los encuestados por Nokia aseguró haber tirado a la basura algún móvil.
