Según explica una nota emitida hoy por esta universidad, el audífono activa un sistema de reducción de ruido cuando detecta una conversación con ruido de fondo o disminuye su ganancia para evitar sonidos molestos si el usuario se encuentra en un atasco.

Los audífonos que se comercializan en la actualidad necesitan que el usuario active el entorno de audición en que está (conversación en ambiente ruidoso, conversación en ambiente tranquilo, ruido o música) por medio de pulsadores o controles remotos, lo que dificulta su uso por parte de las personas mayores.

Los audífonos recogen la señal por un micrófono, un procesador la amplifica en función del entorno y el resultado final llega al usuario a través de un altavoz.

El proyecto presentado por la Universidad ha sido desarrollado por el Grupo de Procesado de Señales Sonoras.

Según Enrique Alexandre, uno de los investigadores involucrados, los procesadores de estos aparatos son mil veces más lentos que los de los ordenadores, debido a su tamaño más pequeño.

Una de las ventajas del nuevo audífono es que un sistema parecido podría mejorar la calidad del sonido de los manos libres de los móviles en función del ambiente en el que se encuentre el usuario, afirma Alexandre.

El proyecto presentado hoy mejoraría la calidad de vida del trece por ciento de la población de los países desarrollados, que es el que sufre pérdidas de audición, según un estudio publicado en el Journal on Applied Signal Processing.