Un comunicado de la agencia espacial estadounidense indicó que una de esas imágenes, captada a una distancia de unos 6.800 kilómetros, muestra el panorama de una zona iluminada de aproximadamente 21 kilómetros en el que se destaca el cráter "Stickney".

Las fotografías, a las que se agregaron colores, muestran materiales cercanos a los bordes del cráter.

También aparecen en ellas otros cráteres y depresiones que parecen haberse formado como resultado de impactos provenientes del planeta.

El comunicado de la NASA indicó que las fisuras que se detectan en las paredes de Stickney y otros cráteres son resultado del alud de material hacia el interior del cráter, arrastrado por la débil fuerza gravitatoria de la luna que es de menos de la milésima parte de la terrestre.

Según Alfred McEwen, principal científico de la MRO del Laboratorio Lunar y Planetario de la Universidad de Arizona, la luna marciana es de gran interés para los astrónomos porque puede contener agua en forma de hielo y materiales ricos en carbono.

Nathan Bridges, miembro del equipo científico de la sonda en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA, indicó que esta no es la primera vez que se captan imágenes de Fobos.

"Sin embargo, estas son de mucho mayor calidad y nos suministran los mejores datos conocidos hasta ahora de Fobos. Esas imágenes nos ayudarán a determinar el origen y la evolución de esta luna", indicó.