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Javier Cea, de joven a vieja promesa en el cine

Javier Cea, de joven a vieja promesa en el cine

Hace muchos años que no me encontraba a Javier Cea por el Casco Vello vigués. Lo recuerdo como una joven promesa viguesa del cambio de milenio, así lo acreditaba en 1999 la revista "Interviú" dedicando un reportaje a su persona, sin necesidad de desnudarse, catalogándolo como uno de los 10 jóvenes emprendedores del país. Claro, llevaba desde los 25 años al frente de agencia de publicidad y producción audiovisual en Vigo "Odi Media" . Sin alcanzar los 30 produce y estrena en 2000, en el ya desaparecido CINE VIGO, la película The Last Patrol (La colina de la Muerte). Una ópera rock dirigida por la viguesa Cora Peña y con banda sonora de Óscar Avendaño, grabada en los estudios de Javier Abreu con la colaboración de una veintena de músicos de la movida viguesa: Siniestro Total, Bromea o qué, Killer Barbies, Aerolíneas Federales, Os Resentidos. Se convirtió en una peli de culto y pasó ese año por el Festival de cine de San Sebastián.

Parecía que Vigo recuperaba el pulso de los mejores tiempos de la movida. En las calles de Vigo se rueda el largometraje LENA (2001) dirigido por Gonzalo Tapia y protagonizado por una jovencísima actriz viguesa, Marta Larralde. En aquellos tiempos Vigo parecía un pequeño Hollywood y el puente de Rande emulaba al Golden Gate de San Francisco. La EISV (Escuela de imagen de Vigo) convierte la ciudad en un plató cinematográfico y actores veteranos como Uxia Blanco, Morris, Manquiña, Luis Zahera, Sergio Pazos? le ponen cara y ojos a una avalancha de noveles cineastas salidos de la "Factoría Marcote", se estrena GALACTEA, (2002), un ambicioso cortometraje en cine 35 mm, de "ciencia ficción rural" protagonizado por un entonces alumno de la Escuela de Imagen, el inclasificable Pablo Dios. En esta ocasión tuve el placer de compartir una escena interpretando a un traficante de queso de tetilla escoltado por una pareja de guardia civiles galácticos, "Cachas y Muiñas", interpretados por Luis Zahera y Sergio Pazos. Ese mismo año en el mítico local del Arenal, asisto a una fiesta de cumpleaños de Javier, en la que me encuentro al director de cine Benito Zambrano premiado con un Goya por "Solas", a una delegación de la Escuela de Cine de San Antonio de los Baños (Cuba), actrices y actores como Uxia Blanco, Marta Larralde, Celso Bugallo (premio Goya por "Mar Adentro" ) y otras caras bien conocidas del faranduleo vigués. El tema más recurrente de aquella fiesta era la inminente fundación en Vigo de la EGACI (Escuela Superior de Artes Cinematográficas de Galicia). Basta con tirar de la hemeroteca para encontrar un denominador común en todos estos acontecimientos, la firma de Javier Cea y Odi Media como productor.

Han pasado 20 años y me reencuentro con Javier Cea paseando por el Casco Vello como un turista más, acompañado de dos niños, sus hijos, y su mujer Salomé Blanco. La curiosidad me mata; ¿Javier, qué ha sido de tu vida?, eras una joven promesa del cine vigués y ahora te encuentro por aquí, como todo un padre de familia, turisteando en bermudas. Su respuesta es ágil. Compruebo que no ha perdido ese punch de productor capaz de reducir dos décadas en un "story line". "Todo sigue igual, me dice, he pasado de una joven promesa a una vieja promesa. Hace un par de meses que he cumplido 50 años. De Vigo me fui para La Coruña para rodar una película, no volví, me pase cuatros años allí, de rodaje en rodaje, películas, documentales, spots para televisión, con suerte descansando algún que otro domingo, después me fui para Madrid persiguiendo un amor. Con la crisis me refugié en la producción de contenidos para internet y esto de trabajar para las pequeñas pantallas me dio mucha flexibilidad, lo que me permitió vivir el día a día con mi familia, es lo más importante ahora para mí. Pero el cine sigue ahí, no sé que tiene el cine".

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