"Seis de cada diez personas mayores de 70 años desaparecidas en Galicia aparecen muertas, un porcentaje muy elevado comparado con la media nacional". Lo destaca Juan Carlos Ramos, coordinador de SOS Desaparecidos Galicia, una organización constituida hace tres años por voluntarios que activa las alertas en las redes sociales. Ramos pertenece también al equipo de voluntarios digitales en emergencias Vost Galicia.
-¿Presentan algún perfil peculiar las personas desaparecidas en Galicia?
-Lo más significativo es el elevado porcentaje de personas mayores de 70 años desaparecidas desde 2015 que aparecen muertas, en torno al 60 por ciento de todos los casos. Es un porcentaje altísimo si lo comparamos con lo que sucede en otras comunidades españolas. Lo triste para nosotros es que los cuerpos se encuentran a 2 o 3 kilómetros del domicilio familiar en el plazo de 5 o 6 días, como recientemente sucedió con una mujer de Trives. Ese retraso en el hallazgo de los cuerpos puede deberse a que los equipos de rescate empiezan a trabajar tarde, pero sobre todo de debe a la falta de medios.
-¿Mantienen en SOS Desaparecidos contactos directos con equipos de rescate?
-Con nosotros colaboran activamente dos equipos de búsqueda canina, uno de ellos el de Protección de Vigo. Cualquier familia que necesite un equipo canino puede ponerse en contacto con nosotros y les facilitamos ese servicio, como ha ocurrido en la búsqueda de Iván Durán, el chico desaparecido en agosto en Baiona.
-¿Qué servicios presta SOS Desaparecidos a las familias además de difundir las fichas?
-La difusión de las fichas es la parte más visible de SOS, pero además contamos con tres departamentos específicos para ayudar a las familias en la búsqueda: uno de Orientación, para que las familias sepan qué es lo que tienen que hacer; otro Jurídico, con el que les facilitamos todo tipo de trámites legales ; y un tercer departamento, el de Psicología. Ponemos a disposición de las familias de forma gratuita equipos de profesionales. Se trata también de voluntarios -abogados, psicólogos€- que colaboran con nosotros de forma altruista.
-¿Qué difusión alcanzan sus alertas de desaparecidos?
-Son miles las descargas de nuestras fichas de desaparecidos, y en los casos más mediáticos, son cientos de miles. La ficha de Diana Quer, por ejemplo, se ha descargado 700.000 veces. Además creamos nuestras propias guías para orientar a las familias en el uso de las redes sociales, porque en España no existe un protocolo de actuación en casos de desaparecidos. La gente desconoce, por ejemplo, los trámites sobre la declaración de ausencia o las ayudas oficiales cuando el desaparecido es el cabeza de familia.
-¿Y cómo es su colaboración con las Fuerzas de Seguridad?
-No hay una comunicación fluida con las fuerzas policiales. Pero además, los distintos cuerpos y fuerzas -Cuerpo Nacional de Policía, Guardia Civil€- no intercambian sus informaciones, trabajan por separado. Cada cuerpo te da un número de desaparecidos distinto. No hay concienciación de la importancia del fenómeno de las desapariciones en España, con más de 15.000 denuncias al año. Además, un desaparecido no se considera víctima a no ser que el hecho esté vinculado a un posible delito; la única oficina de Atención a Desaparecidos la tienen los Mossos d´Esquadra en Cataluña, pero tampoco colabora demasiado.
-¿A qué se denomina desapariciones inquietantes?
-Son aquellas desapariciones en que existe un riesgo inminente para la vida de esa persona, algo que se suele dar en menores de edad o en personas de las que no se sabe dónde pueden estar. Son casos en que se activa la alerta internacional para intentar localizarlos. Nuestra asociación tiene convenios con otras organizaciones similares y activamos alertas de búsqueda en diversos países europeos
-También es inquietante el aumento de casos de desaparecidos en España.
-Así es. Si hasta ahora había una media de 14.000 denuncias de desapariciones anuales, en los últimos años la cifra casi se ha duplicado hasta llegar a las 24.000 denuncias. Galicia está en la media nacional en cuanto a número de desapariciones. Eso sí, destaca el hecho ya comentado del elevado número de personas mayores de 70 años fallecidas, son personas que se desorientan muy fácilmente. En los últimos años ha aumentado este tipo de casos, posiblemente vinculados a la crisis económica, con el cierre de residencias de ancianos o a la falta de cuidadores.
-¿Qué papel juegan los medios de comunicación a la hora de localizar a un desaparecido?
-Un caso puede ser mediático y utilizar bien los recursos de la televisión y de la prensa para la mayor difusión de la ficha, pero, por desgracia, cuando hablamos de un caso mediático nos encontramos con que se filtra información que no tiene nada que ver con la desaparición, sino con cuestiones personales o familiares. En esos casos se entorpece la investigación. Ojalá que todos los casos de desapariciones tuvieran una gran difusión en los medios, aunque solo fuera los tres primeros días; seguro que aparecerían el 90 por ciento de ellos. Pero cuando ya entramos en el circo mediático, ahí hacemos daño a las propias familias y no se ayuda para nada en la búsqueda.
-¿Cómo se financia SOS Desaparecidos?
-No tenemos ningún tipo de ayuda económica, ni siquiera aceptamos donativos de las familias. Funcionamos con presupuesto 0 desde la solidaridad. Cada delegado asume los gastos que conlleva su trabajo, y la directiva se encarga de los gastos que suponen la página web, o los dos teléfonos de emergencia de 24 horas, que en épocas especiales como Navidad o Semana Santa se amplían a cinco teléfonos. Lo único que tiene la directiva son gastos, porque no llega ningún ingreso.
