La compañía es el regalo más emotivo que se le puede realizar a los que sufren la soledad. Esta es la premisa con la que el grupo pastoral de la salud de Capuchinos lleva organizando desde hace años festivales benéficos navideños en residencias y geriátricos de la ciudad. La coordinadora del colectivo, Carmen Rodal, lo tiene claro: "La caridad bien entendida es la solidaridad y el acompañamiento a los ancianos que viven en soledad".

Las visitas que la pastoral de la salud realizan periódicamente a lo largo del año se convierten en actuaciones artísticas con la llegada de las fiestas navideñas.

Con el objetivo de llevar una brizna de alegría a los residentes del centro de los Hermanos Misioneros de los Enfermos Pobres de Teis el pasado sábado organizaron un pequeño festival en el auditorio de este edificio en el que participaron el grupo Endanza de la Asociación de Vecinos Santa Mariña de Cabral, dirigido por Anabel. Sus integrantes atendieron la solicitud del grupo pastoral de Capuchinos y no dudaron en compartir parte de su tiempo y su talento artístico con los enfermos y personas "sin techo" que atiende esta institución benéfica.

El próximo evento se celebrará el sábado 15 de diciembre a partir de las 18:30 horas en la residencia geriátrica asistida del Meixoeiro. En esta ocasión intervendrán en el festival los componentes del grupo de baile y gaitas de la Asociación de Veciños Santa Mariña de Cabral.

La intención de los promotores es organizar festivales interactivos, ya que además de actuar, los integrantes de los grupos comparten arte y afecto con los residentes de ambos centros. "Se trata de decirles y hacerles sentir que hay quien piensa en ellos y además en los Hermanos Misiones de los Enfermos Pobres", comenta Carmen Rodal.

La iniciativa de la pastoral de la salud pretende que durante unas horas el público al que se dirigen olvide sus preocupaciones y enfermedades. También pretenden que los integrantes de los grupos musicales conozcan directamente la situación de estas personas y se animen a regalarle parte de su tiempo a lo largo de todo el año y no sólo en las fiestas navideñas. "El tiempo que dedicamos a visitarles y escucharles es la mejor caridad y solidaridad", concluye la coordinadora de esta pastoral.