Investigación

Sara Gómez se hizo una abdominoplastia y una liposucción a la vez menos de un año antes de la operación mortal

Lo confirma en el juzgado el cirujano que la operó entonces, al que la mujer le dijo que no le gustaba el resultado y quería volver al quirófano: este doctor se negó a intervenirla tan rápido

Familiares de Sara Gómez colocan pancartas en la puerta del juzgado de Cartagena donde este viernes declararon el urólogo y el doctor.

Familiares de Sara Gómez colocan pancartas en la puerta del juzgado de Cartagena donde este viernes declararon el urólogo y el doctor. / Loyola Pérez de Villegas

Sara Gómez, la mujer muerta en Año Nuevo tras someterse a una operación de estética en Cartagena, se había hecho una abdominoplastia y una liposucción a la vez en enero de 2021, menos de un año antes de la operación mortal, por lo que el doctor que la intervino entonces explicó a su paciente que no era recomendable que entrase en quirófano tan pronto. Así lo confirmaba este viernes en el Juzgado de Cartagena, que se ocupa de la instrucción de la causa, el cirujano que la operó entonces, al que la mujer le dijo que no le gustaba el resultado y quería volver a hacerse una intervención estética: este doctor se negó a hacerla él.

Evaristo Llanos, abogado de la familia de la difunta, detalló a este periódico que el primer cirujano "le dijo que, como mínimo, había que esperar un año para volver a operar". Además, "él consideraba que la mujer había quedado bien y que no tenía ninguna grasa". No obstante, ella buscó a otro médico: el doctor Javier Alejandro M.D.C., ahora investigado por su presunta responsabilidad en la muerte de Sara. La operó en un quirófano alquilado en el Virgen de la Caridad de Cartagena.

"Era más el daño que se podía causar operando que esperando"

También declaró un urólogo del Santa Lucía, que desaconsejó, al ver el estado de la enferma, "cualquier tipo de operación, porque era más el daño que se podía causar operando que esperando". A preguntas de la defensa de Javier Alejandro M. D. C., el sanitario admitió que el estado de salud de Sara mejoró desde el día 2 de diciembre al 3, pero porque el 2 estaba en shock hipovolémico, una afección en la cual la pérdida grave de sangre hace que el corazón sea incapaz de bombear suficiente sangre al cuerpo.

Testifica el urólogo

Ese día 3 la paciente se hallaba "estable hemodinámicamente", certificó este urólogo. Fuentes cercanas al caso pusieron sobre la mesa la posibilidad de que la mujer fue intervenida entonces en el Santa Lucía, algo que no entienden por qué no se hizo.

Tanto Llanos como Pablo Martínez, letrado del doctor imputado, afirmaron que la magistrada les ha comunicado que en breve va a dar por cerrada la instrucción: cuando lleguen los informes forenses, a partir de enero, la primera fase concluirá.

Acoso al médico

A la pregunta de cómo se encuentra su cliente, Pablo Martínez aseguró que "él está tranquilo, porque confía en la Justicia", aunque a la vez se siente "cansado de la persecución social y laboral" que sufre "por parte de familiares y amigos" de Sara Gómez. Un acoso que ha puesto en manos de sus abogados y que ya ha sido denunciado en el juzgado.

Los allegados de la mujer, lamenta Martínez, descubrieron que Javier Alejandro M. D. C. se encontraba trabajando en un hospital de Andalucía y comenzaron a bombardear con reseñas negativas al centro. De ahí que el doctor decidiese tomar medidas legales.