Unas molestias por ruidos en una finca del Port de Sagunt (Valencia) han acabado con una mujer de 68 años de edad debatiéndose entre la vida y la muerte debido a la violenta agresión que sufrió por parte de un vecino.

Todo ocurrió este martes sobre las 19.30 horas, en una finca del barrio de Churruca, cuando un vecino de esa finca decidió agredir violentamente a la mujer, acusándola de realizar ruidos que, según él, le resultaban muy molestos. "En cuanto le abrió la puerta, empezó a agredirla", contaba ayer una residente en la zona, aún conmocionada por lo sucedido y muy preocupada por la salud de la víctima, que se encuentra hospitalizada en estado crítico.

El hombre, según otras fuentes, fue tan violento que la mujer, Antonia O.F., acabó recibiendo un fuerte golpe contra el suelo que le provocó una fractura craneal. En un primer momento, el equipo médico del SAMU desplazado a la vivienda logró estabilizarla y la evacuó de urgencia en una ambulancia de soporte vital avanzado al Hospital de Sagunt.

Sin embargo, su estado de extrema gravedad obligó a evacuarla a continuación al Hospital Clínico de València, donde permanece ingresada en la UCI tras haber sido intervenida de urgencia.

"Yo no he sido, yo no he sido"

Fue precisamente una de las vecinas quien alertó al 112 al escuchar sus desgarradores gritos de auxilio, lo que propició la llegada de varias dotaciones de la Policía Nacional de la comisaría de Sagunt. Los agentes encontraron a la mujer caída en el suelo de la cocina, rodeada de sangre, y a su presunto agresor, a su lado. Al ver llegar a los policías, J.C.M., de 52 años, levantó las manos y les dijo "yo no he sido, yo no he sido; ya estaba así cuando he entrado".

Sin embargo, los agentes, ante las evidencias observadas en el lugar y el testimonio de la vecina, lo detuvieron de inmediato por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa y se lo llevaron esposado a la comisaría, mientras los servicios sanitarios se ocupaban de atender a la mujer.

Tanto el arrestado como su víctima eran vecinos desde hacía años de la misma finca y vivían solos en sus respectivos domicilios, según los testimonios recogidos por este diario. Por el momento, no hay constancia de si había conflictos previos o si se habían cruzado alguna denuncia. El presunto agresor será entregado hoy en el juzgado de guardia de Sagunt.