Agentes de la Policía Nacional y de los Mossos d'Esquadra han detenido cinco presuntos miembros de una banda de traficantes dirigida por el narco conocido como 'el Califa del hachís' o 'el Cali', uno de los arrestados. Los investigadores le consideran el organizador de un alijo de casi 3.600 kilos de hachís desembarcado en diciembre de 2017 en Deltebre (Tarragona) e incautado unos meses más tarde. El pasado año fue arrestado por la Policía Local de Alicante con 50 gramos de hachís en uno de los controles por el estado de alarma y las investigaciones del Grupo de Estupefacientes de la UDYCO de la Policía Nacional revelaron indicios de su presunta participación en la organización del alijo decomisado hace más de tres años.
Los cinco detenidos quedaron en libertad con cargos. Dos de ellos salieron libres tras declarar en dependencias policiales y los otros tres tras pasar a disposición del juzgado de guardia de Alicante, donde dos de ellos fueron asistidos por los abogados Joaquín Lacy y Concepción Ferrández.
Según ha informado la Comisaría Provincial, el alijo imputado a 'el Cali' fue desembarcado el 7 de diciembre en la costa de Deltebre, en Tarragona. La Policía Local de este municipio comunicó a los Mossos de Tortosa que una persona había localizado una furgoneta encallada cerca de una acequia en el camino de la Balsa de la Arena de Deltebre, en el Bajo Ebro. Se trataba de un camino particular que daba acceso directo a la playa y las cadenas de la finca habían sido cortadas.
Los Mossos inspeccionaron la furgoneta y localizaron una embarcación neumática pinchada y piezas de neopreno. En la furgoneta también encontraron más piezas de neopreno aún húmedas y llenas de arena y mientras revisaban el vehículo se acercó otro testigo que les contó que un tractor habían desencallado otra furgoneta de la arena. Los agentes tenían claro que se habían llevado a cabo un desembarco de droga y las sospechas se confirmaron cuando unos días más tarde encontraron un fardo de grandes dimensiones lleno de hachís.
Los investigadores de la División de Investigación Criminal (DIC) de la zona del Ebro identificaron al titular del vehículo como un español domiciliado en Alicante y con varios antecedentes por tráfico de drogas. Asimismo, identificaron a otras dos personas de Alicante que también participaron presuntamente en la gestión y materialización del desembarco de la droga. Estas tres personas, así como otras dos residentes en la comarca de el Montsià que almacenaban la droga, fueron detenidas posteriormente. No obstante, el juzgado de Tortosa que investigaba a los tres alicantinos acordó el sobreseimiento provisional de las actuaciones contra ellos.
Dos de estos tres alicantinos han vuelto a ser detenidos recientemente en Alicante tras vincular la Policía dicho alijo con "el califa del hachís". El Grupo de Estupefacientes de la UDYCO relacionó a los tres alicantinos investigados por el juzgado de Tortosa con "el Cali" y comprobaron que "había gestionado y organizado diferentes entregas de hachís en la costa de levante", afirma la Policía. La UDYCO y la DIC crearon un equipo de investigación conjunto y concluyeron que "el Califa" lideraba desde Alicante un grupo dedicado a introducir hachís de Marruecos en España. La red transportaba los alijos en embarcaciones neumáticas y los fardos de droga eran desembarcados en las costas de Cataluña y Comunidad Valenciana, donde eran cargadas en furgonetas de alquiler.
Una vez concluyeron las pesquisas, agentes de la Policía y los Mossos detuvieron a cinco personas en Alicante, dos de las cuales ya fueron arrestadas tras el desembarco de la droga en 2017. "El Califa" fue arrestado por los agentes en un gimnasio de la playa de San Juan.
