Fedor Smólov no olvidará el 26 de junio de 2020 fácilmente. No solo porque el Celta lograse la permanencia en Primera División después de empatar con el Espanyol en el último partido de la temporada sino porque el delantero ruso fue víctima de un atraco en las calles de Barcelona.

Según revela El Caso, Smólov decidió disfrutar de la noche barcelonesa junto unos amigos para celebrar que los celestes seguirán un año más en la élite del fútbol español. Después del agónico partido en el RCDE Stadium, decidieron pasear por la zona del Port Olímpic y disfrutar de las discotecas instaladas en la zona sin saber que en una de ellas, el ruso sería víctima de un grupo de jóvenes que acabaron robándole un reloj valorado en 300.000 euros.

Los atracadores de Smólov utlizaron el modus operandi habitula de estos grupos organizados que actúan en Barcelona: unos marcan el objetivo y otros ejecutan el robo sabiendo qué relojes tiene más valor. Después de la sustracción, el jugador del Celta de Vigo se presentó en la comisaría más cercana para presentar una denuncia.

El robo del delantero ruso recuerda al de los cinco jóvenes que, a golpes, arrebataron un reloj de pulsera a un turista mientras su novia pedía ayuda a gritos. Los autores de ese asalto fueron detenidos posteriormente por un presunto robo con violencia en grado de tentativa, puesto que los agentes pudieron recuperar el reloj.