Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional están cooperando en la investigación de una "peligrosa" banda activa en la provincia de Lugo que, según sus indagaciones, se dedica a simular la venta de coches de alta gama para quedar con sus víctimas en zonas despobladas y robarles el dinero de la transacción tras agredirlas.

Los miembros de la banda habrían actuado al menos en cuatro ocasiones en Galicia, tres veces en municipios de la provincia de Lugo y una en el de Ourense. El golpe más violento de los que hasta ahora se tiene constancia lo perpetraron este jueves, cuando agredieron a un hombre de 37 años, vecino de Burgos, con el que habían quedado en Monforte, supuestamente, para venderle un vehículo de la marca Porche del modelo Panamera.

Sin embargo, una vez en el lugar en el que habían quedado --una zona aislada-- los dos supuestos vendedores agredieron violentamente al hombre --que tuvo que recibir después asistencia hospitalaria-- e incluso llegaron a efectuar un disparo para hacerse con los 19.000 euros que llevaba.

La Policía sospecha que los dos individuos que actuaron el jueves en Monforte son "los mismos" que cometieron en los últimos meses actos parecidos en Coles (Ourense) y en Sarria, así como uno anterior también en Monforte.

De hecho, "el modus operandi es el mismo", porque en los cuatro casos que están siendo investigados los falsos vendedores citaron a sus víctimas "en el extrarradio de los núcleos de población" y, nada más establecer contacto con ellas, lo primero que hicieron "fue quitarles el teléfono móvil".

Con esa forma de proceder, precisan, se aseguran de que "tendrán tiempo suficiente para huir del lugar del robo" y "cuando las víctimas tienen posibilidad de dar aviso, probablemente ellos ya están lejos".

La misma fuente también lamenta la falta de prudencia de las propias víctimas al acudir a una zona apartada para encontrarse con gente a la que no conocen de nada y con una "gran suma de dinero en efectivo", cuando hoy en día hay formas de pago mucho más seguras, sostienen.

Los investigadores tienen claro que se trata de una "banda" organizada, aunque desconocen si son de la zona o extranjeros, y precisan que son "peligrosos". Los sospechosos suelen convocar a sus víctimas "en el extrarradio" de las localidades para una supuesta venta de un coche de alta gama y, allí, les piden el dinero que llevan para la transacción. "Si no se lo dan, emplean la violencia", añaden.