Cinco años y medio de prisión y 3 años de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante tres años. Esta es la condena que solicita el fiscal para un conductor vigués acusado de intentar atropellar a los agentes que iban a identificarlo cuando estaba mal aparcado en la Glorieta de Isaac Peral en Vigo y que huyó protagonizando una persecución por la autopista AP-9 y la autovía A-55, hasta Petelos en O Porriño. El Ministerio Público solicita 4 años de cárcel por un delito de atentado a agentes de la autoridad haciendo uso de objeto peligroso, y otros 18 meses por un delito contra la seguridad vial en su modalidad de conducción temeraria.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 9.30 horas del pasado 18 de enero. El conductor, según el escrito de acusación, estacionó su furgoneta Berlingo de forma indebida sobre la acera y dos agentes de la Policía Nacional se dirigieron a él cuando regresó. Le pidieron que apagara el vehículo y dejara las llaves sobre el salpicadero y mientras un agente se situaba delante del vehículo, el conductor arrancó y el policía tuvo que saltar a la acera para evitar ser arrollado.

El coche patrulla inició la persecución con luces y sirenas, pero el acusado accedió a la AP-9 desde la rotonda de Isaac peral y tomó luego la A-55 hacia Porriño. Finalmente circuló por de las vías de servicio de la autovía y accedió al barrio de Rubial, en la parroquia porriñesa de Petelos, donde los agentes perdieron su pista.

El escrito de acusación recoge que el conductor realizó en todo momento una conducción a una velocidad excesiva e inadecuada "par alas circunstancias de la vía, bajo la lluvia y con un tráfico denso, con continuos volantazos y maniobras bruscas que obligaban a los demás usuarios de la vía a maniobrar o frenar brusca y repentinamente para esquivar el vehículo conducido por el acusado y evitar así la colisión con el mismo".

El fiscal sostiene que mientras circulaba por la AP-9, el acusado cruzó su vehículo delante de un tráiler de grandes dimensiones que se vio obligado a realizar precipitadamente una maniobra de frenado brusco para evitar la colisión. También, en una vía de servicio de la autovía, otro turismo que trataba de incorporarse se vio obligado a realizar una maniobra evasiva y frenar par ano ser embestido por el acusado durante su fuga.

El juicio se celebró ayer en el Juzgado de lo Penal 2 de Vigo, ya que el acusado se negó a aceptar una posible conformidad ya que se considera inocente dad la gravedad de los delitos que le imputan.