Caso Abierto - Faro de Vigo

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Un acusado de fingir ser pitonisa y abusar de una menor de Vigo afronta 25 años de cárcel

El hombre se hizo pasar en WhatsApp por una echadora de cartas para convencer a la joven de 15 años de que tuviese relaciones con él -La chica padece retraso mental leve

Un caso de presuntos abusos sexuales a una adolescente de Vigo en el que el presunto agresor llegó a hacerse pasar en WhatsApp por una mujer que echaba las cartas en su estrategia de convencer a la víctima para que tuviese relaciones sexuales con él. Estos hechos, ocurridos en 2017, llegan ahora a juicio. Una vista que está señalada para la próxima semana en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en la ciudad olívica, y en la que la Fiscalía solicita para el procesado 25 años y medio de cárcel. Lo considera autor de dos delitos continuados de abusos sexuales con penetración a menor de 16 años y de otro que se recoge en el artículo 183 ter 1 del Código Penal, que castiga a quien a través de internet, teléfono u otro tipo de medio tecnológico contacte con un menor para proponerle un encuentro con fines sexuales. La joven tiene reconocida una discapacidad del 33% y padece retraso mental leve.

Todo se remonta al verano de 2017. La víctima, en esa época de 15 años de edad, residía en Vigo. Un día de junio la adolescente acudió con una amiga a casa del acusado y se quedó a dormir allí. Según el escrito provisional del Ministerio Público, ambos compartieron una misma cama, circunstancia que el procesado "aprovechó" para abusar de la menor. Una situación que se "repitió" a la noche siguiente.

En la versión restringida del escrito del fiscal suministrada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) en aras de proteger la identidad de la perjudicada se relata que, meses después, la chica contactó con el hombre a través de la aplicación WhatsApp, por lo que comenzaron a tener conversaciones por medio de mensajes. Y al mismo tiempo, siempre según el relato de la acusación pública, el procesado, usando un teléfono de su titularidad, se hizo pasar por una mujer de Valencia llamada Lara que se dedicaba a echar las cartas. Lo hizo para contactar al mismo tiempo mediante esa falsa identidad con la menor, consiguiendo mantener "conversaciones frecuentes y casi diarias" por medio de wassaps en los que supuestamente intentaba convencer a la chica de que tuviese relaciones sexuales con él.

La chica cayó en el engaño, ya que creía que estaba escribiéndose con esa mujer valenciana. La Fiscalía sostiene que la artimaña del procesado "facilitó" que la menor -que con 15 años todavía no alcanzaba la edad de consentimiento sexual que es a partir de los 16- "accediese" a tener relaciones. En esas navidades de 2017 el procesado y la adolescente quedaron al menos dos veces en un monte donde él presuntamente abusó de ella. En la segunda ocasión, la chica, describe el fiscal, estaba muy tensa y pidió al hombre que parara, "lo que, tras un rato, él hizo".

Aplicación

"El procesado se aprovechó para satisfacer sus deseos sexuales de la edad de la menor, de tan solo 15 años, y se valió igualmente de WhatsApp, aplicación mediante la que concertaba los encuentros", resume la Fiscalía, que cita también la discapacidad que se le reconoció a la joven, "que puede afectar a sus capacidad para prever las consecuencias de sus actos".

Junto a la pena de prisión, la Fiscalía solicita que se impida al acusado aproximarse o comunicarse con la menor durante períodos que suman en total 41 años. Además plantea que, una vez saliese de la cárcel en caso de condena, que se le imponga libertad vigilada y la obligación de realizar programas formativos de educación sexual. Y finalmente, pide que indemnice a la chica con 6.000 euros.

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