La Audiencia de Barcelona ha condenado a 20 años de prisión a la joven de 18 años que lanzó a su hija recién nacida por la ventana del cuarto de baño donde parió tras dar a luz en el mismo lugar en 2018. El jurado consideró probado que la mujer actuó "intencionadamente" y a sabiendas de que la niña moriría, aunque la defensa de la acusada alegó como eximente que padece una caracteropatía que le impidió comprender la ilicitud de sus acciones.