Rocío Gondar González, una de las dos mujeres condenadas por el asesinato en febrero de 2014 del octogenario de Chancelas Secundino Prego Amil, fue hallada muerta ayer en su celda por los funcionarios de la prisión de Mansilla de las Mulas, en León, en donde cumplía la pena de 20 años de cárcel que le fue impuesta por la Audiencia de Pontevedra.

El cuerpo sin vida de Rocío Gondar fue localizado a las siete menos cuarto de la tarde del lunes en su celda, en el momento en el que las internas pueden bajar al patio después del periodo de la siesta. En principio, todo parece indicar que se trata de un suicidio.

Rocío Gondar era vecina de la parroquia de Noalla, en Sanxenxo y en abril de 2016 fue condenada junto a Albertina Táboas como autoras del asesinato a golpes en su casa de Chancelas de Secundino Prego Amil, de 84 años, para quien trabajaban como sus cuidadoras. El jurado las declaró culpables de asesinato y la Sección Segunda de la Audiencia condenó a Rocío a una pena de veinte años y medio de prisión, frente a los veintidós de su compañera de banquillo, quien está cumpliendo condena actualmente en la prisión de A Lama.

Mientras que Albertina negaba los hechos, Rocío Gondar confesó el crimen casi desde un primer momento.