La Audiencia de Ourense sentará los próximos días 18 y 19 en el banquillo a J.L.F.A., exempleado de una sucursal bancaria de Entrimo que llegó a ascender a director, acusado de apropiación indebida y falsedad documental. El fiscal solicita 6 años de prisión por, presuntamente, aprovecharse de la confianza de sus clientes para adueñarse de los fondos de sus cuentas. Ocurrió entre 1998 y 2015, generando un perjuicio a los afectados y a la entidad (que restituyó el dinero en las cuentas de los perjudicados) de 1,5 millones de euros que ahora se solicita que restituya.

La Fiscalía sostiene que el acusado se aprovechó de la confianza de sus clientes y, en un período de 15 años, estableció una "dinámica" en la que se vieron afectadas 14 personas. Supuestamente, hizo disposiciones indebidas de fondos sin autorización y se apoderó de cantidades entregadas en efectivo. Asimismo, añade, el acusado habría realizado pagos de extratipos por los fondos depositados al margen de los contabilizados por la entidad.