El Juzgado de lo Penal 1 de Pontevedra acoge hoy el juicio a un empresario acusado de realizar acciones de sabotaje en una planta fotovoltaica de generación de energía eléctrica de Cerdedo con el fin, según la Fiscalía, de que la compañía que explotaba las instalaciones le transmitiese a "coste cero" la propiedad de dicha empresa, de la que él había sido socio.El fiscal acusa a R.R.V. y a otra persona que supuestamente colaboró con él en esas acciones, P.L.B.B., de delitos continuados menos graves de coacciones y daños intencionados, solicitando para cada uno dos años de prisión, multa y que indemnicen a la compañía afectada, Fotovoltaica O Sangal, con 195.450 euros por los perjuicios causados. La acusación particular eleva la solicitud de prisión a 3 años.

La planta se instaló en 2013 en las cubiertas de una nave de una empresa de fabricación de colchones. Los actos de sabotaje ocurrieron entre enero y junio de 2017. Supuestamente, el principal acusado ordenó esos actos, consistentes en bajar los térmicos de la instalación provocando cortes en el funcionamiento. Al tomarse medidas, como colocar candados para evitar el sabotaje, éstos llegaron a ser rotos con una radial, causando nuevas paralizaciones de la producción de la planta.