La Dirección Xeral de Saúde Pública de la Consellería de Sanidade realizó, después de recibir la alerta, una inspección en Frinsa del Noroeste, la empresa proveedora de las latas de atún comercialidadas como marca blanca en supermercados DIA y por las que se ha decretado un brote de intoxicación alimentaria por toxina botulínica, y no detectó "ninguna anomalía" en el tratamiento para las conservas, tras verificar los controles de producción y los procesos de esterilización.

De ello informa en un comunicado de prensa la consellería, que indica que después de la notificación por parte de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, comenzó "con carácter inmediato" a recabar información "complementaria", al igual que el resto de comunidades requeridas.

Asegura que identificó "que todo el producto implicado fue suministrado" a DIA, empresa distribuidora, "no existiendo más existencias fuera de ese distribuidor". Y añade que "paralelamente" mantuvo "contacto permanente" con la comunidad autónoma de Castilla y León para "evaluar la trazabilidad de los restantes productos empleados en el menú que supuestamente causó esta intoxicación puntual".

Saúde Pública realizó en la mañana de este viernes una nueva inspección "complementaria", al recibir la comunicación de la agencia de la confirmación de la presencia de toxina botulínica en la muestra del producto abierto y empleado en el plato elaborado por los pacientes. Los casos se detectaron en Castilla y León y los pacientes fueron ingresados en el Complejo Asistencial de Salamanca y de Zamora. "Esta visita a la industria de hoy por la mañana tuvo por objeto verificar el mantenimiento preventivo al que se somete el autoclave en el que se elaboró el lote identificado previamente", explica Sanidade.

El departamento autonómico también ha solicitado a la empresa un nuevo estudio de distribución de temperatura y test de penetración del calor del autoclave implicado, con el objeto de verificar "el correcto funcionamiento del mismo". Fuentes de DIA han apuntado que la contaminación se ha debido producir en la fase de producción, bien en la materia prima o en el proceso de esterilización durante el "latado".

La agencia trasladó el día 12, según la Xunta, a las comunidades autónomas de Asturias, Castilla y León, Madrid y Galicia "una alerta ante la sospecha de cuatro casos de botulismo por una posible intoxicación alimentaria, después de una comida familiar en la que el menú incluía ensaladilla". La inspección en Frinsa se realizó el día 13.

Más de 3.000 latas de atún contaminado retiradas

La cadena de supermercados DIA retiró el pasado 10 de agosto 3.420 latas de atún en aceite de girasol de 900 gramos cada una -es decir, en formato grande- de forma preventiva tras el aviso de una posible contaminación de toxina botulínica detectada por parte de las autoridades sanitarias.

La cadena de supermercados ha confirmado que ha sido hoy cuando ha recibido la confirmación de la presencia de toxina botulínica en el análisis de una única lata de un producto fabricado por la conservera gallega Frinsa del Noroeste y del que vende 1,35 millones de unidades al año, esto es, unas 3.560 por día.

El producto afectado es una conserva de atún en aceite de girasol de 900 gramos, de la marca DIA, perteneciente al lote 19/154 023 02587 con fecha de consumo preferente 31/12/2022, según ha detallado hoy la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) y ha corroborado la compañía de distribución.

El producto fue distribuido a establecimientos de las comunidades autónomas de Asturias, Castilla y León, Cataluña, Aragón, La Rioja, Murcia, Navarra, Castilla-La Mancha y Valencia, donde se ha procedido a la inmovilización y retirada de las latas afectadas, según la cadena de supermercados.

El brote se ha detectado tras enfermar cuatro personas, de las cuáles tres ya han sido dadas de alta, después de comer una ensaladilla rusa casera elaborada con el citado atún.

El grupo ha pedido a sus clientes que hayan adquirido latas del lote afectado que devuelvan el producto en su tienda más cercana. Además, y "de forma proactiva", DIA ha asegurado que va a intentar contactar con los clientes susceptibles de haber adquirido este producto "utilizando todos los canales que sean necesarios".

La cadena de supermercados ha lamentado los "inconvenientes que haya podido causar" y ha puesto a disposición de los clientes un teléfono 24 horas (912170453) para atender dudas.

La misma cadena de distribución ya retiró el pasado mes de enero 24.576 latas de sardinas en aceite de oliva en conserva de su propia marca, fabricado por la portuguesa Cofisa ante un posible defecto de esterilización de algunas de esas latas y "únicamente como medida preventiva" fruto de los análisis periódicos de la compañía.

Fuentes de DIA han señalado que, en este caso, los análisis posteriores resultaron negativos. La compañía ya informó el pasado mes de enero que en 2018 efectuó en España y Portugal más de 500.000 análisis internos y más de 10.000 análisis externos en laboratorios acreditados a sus productos.