Una mujer de 37 años ingresó ayer en estado grave en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo tras precipitarse desde el cuarto piso de un hotel de la localidad pontevedresa de Baiona, donde estaba alojada junto a su compañero sentimental. La Guardia Civil abrió una investigación para esclarecer lo sucedido y, aunque las indagaciones aún no están cerradas, ya que falta el testimonio clave de la propia víctima, la principal hipótesis que se baraja es que se tratase de una caída accidental.

La alerta se recibió en torno a las once y media de la mañana. La mujer, de nacionalidad brasileña, estaba alojada en una habitación del establecimiento hostelero baionés. Desde el balcón de esa misma estancia se precipitó al vacío, impactando sobre una zona de césped. Varios particulares avisaron de inmediato al servicio de emergencias 112 de lo sucedido.

Hasta el punto se trasladaron agentes de la Guardia Civil, que se ha hecho cargo de la investigación del suceso, así como efectivos de la Policía Local y una ambulancia medicalizada del 061. Tras prestarle los sanitario los primeros auxilios en el lugar, la herida fue trasladada al Álvaro Cunqueiro con lesiones graves. Cuando llegó al hospital vigués estaba semiinconsciente. Ingresó en la UCI sin que hubiera trascendido ninguna otra información sobre su evolución médica a lo largo de la jornada.

El Instituto Armado dio de inmediato inicio a una investigación en la que todas las hipótesis estaban abiertas. Además de inspeccionar la habitación desde donde se cayó la mujer y la zona en la que impactó, que estuvo acordonada, se recabaron testimonios de testigos. Todo apunta a que de forma previa al siniestro la mujer estaba sentada en la barandilla del balcón del dormitorio. Con ella estaba alojado su pareja, de nacionalidad española y que dio resultado negativo en una prueba de alcoholemia que le fue practicada por los agentes. En otra habitación se encontraban el hijo de este hombre y su novia.

Un testimonio clave

Un testimonio claveTras las indagaciones practicadas en la jornada de ayer, la principal hipótesis es que fue una caída fortuita ya que no se encontraron indicios de intencionalidad. En todo caso, según señalaron las fuentes consultadas, los guardias civiles estaban a la espera de que mejorase el estado de la herida para poder tomarle declaración. Su testimonio, por tanto, es clave de cara a afianzar si es así la tesis que se maneja y dar por cerradas las pesquisas. El hotel se encuentra próximo a la playa de Santa Marta de este turístico municipio.