Un hombre de 29 años murió anoche en la cementera de San Vicente del Raspeig al lanzarse desde un silo de una altura de unos 50 metros con un paracaídas que no se llegó a abrir.

La víctima, que saltó poco antes de la una de la noche, falleció al impactar contra el suelo. La voz de alarma la dio un amigo suyo que le acompañaba y que, al parecer, también iba a efectuar otro salto con paracaídas desde el mismo sitio.

Según han informado fuentes próximas al caso, la víctima tenía un canal en la plataforma de Internet Youtube con tan solo seis suscriptores y el mismo estaba dedicado a los deportes de riesgo, sobre todo, el 'puenting', así como las prácticas y vuelos en paracaídas y parapente.

De esta manera, tenía la intención de filmar el salto en plena noche tras entrar en el recinto de la cementera,

Hasta el lugar acudieron agentes de la Policía Nacional, cuerpo que se ha hecho cargo de la investigación, la Policía Local, la Guardia Civil y una unidad del SAMU que intentó sin éxito reanimar a la víctima.

Se desconoce por el momento cómo accedieron a las instalaciones de la empresa, que en una de las zonas no tiene actividad.

Según han informado fuentes de la Policía Nacional, al parecer el paracaídas de la víctima, de nacionalidad española, iba mal colocado y se abrió solo parcialmente.

Fuentes consultadas por Europa Press han explicado que este tipo de actividad se denomina 'salto base' y consiste en lanzarse al vacío con paracaídas desde puntos elevados.