Los 12 traficantes de drogas que cayeron en la operación 'Gaijo' de la Guardia Civil entre 2016 y 2017 -la red distribuía cocaína y cannabis en las provincias de Ourense y Pontevedra y tenía un laboratorio en Vigo- sellaron ayer, en el juicio celebrado en la Audiencia de Ourense su asunción de culpas y su conformidad con las penas ofrecidas por la Fiscalía. Aceptan condenas individuales de 18 meses a 5 años de prisión -en conjunto, suman 36- y todos podrán optar al beneficio de la suspensión.

El principal implicado, el vigués J. S. C., fue detenido en Xinzo en marzo de 2017, junto a otro acusado. El cabecilla llevaba un paquete de un kilo de cocaína adosado a su espalda y 100 gramos más en el bolsillo interior de su chaleco. Este encausado, al que se le aplica una atenuante por confesión, se conforma con 5 años de prisión y multa de 150.000 euros. En la operación también cayeron su esposa, P. F. C., y su pareja sentimental, M. F. R. G., con quienes compartía distintos domicilios en Vigo. Las mujeres aceptan, respectivamente, condenas de 2 y 3 años de prisión, más multas de 30.000 y 10.000 euros.

El principal implicado utilizaba su coche para realizar la distribución de la droga y solía ir acompañado por su pareja sentimental. Se encargaba de vender y entregar las sustancias estupefacientes a ocho de los implicados que, a su vez, la distribuían en pequeñas dosis a los consumidores y en alguna ocasión a otros vendedores.

La operación se desarrolló el 31 de marzo con la detención del cabecilla cuando llegó a Xinzo desde Vigo en un vehículo conducido por otro de los acusados, J. L. R. H., que acepta 2 años de prisión y multa de 30.000 euros. Estos arrestos desencadenaron el resto de la 'Gaijo'. Al día siguiente se hicieron registros domiciliarios en Vigo, Xinzo, Redondela y Coruxo (Vigo).