El Destacamento de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil deA Coruña, investigó a un conductor como presunto autor de un delito contra la Seguridad Vial.

Los efectivos de la Guardia Civil se encontraban a las 12:16h realizando un control de alcoholemia en el kilómetro 08,500 de la carretera AC-223,en el término municipal de Mesía, cuando pararon a un conductor que arrojó un resultado inusualmente elevado. Al realizarle la prueba con el dispositivo habitual, el etilómetro fue incapaz de mostrar un resultado ya que el conductor superaba la tasa máxima que el dispositivo puede detectar. Fue necesario entonces solicitar la presencia de un vehículo dotado de etilómetro de precisión para repetir la prueba, que arrojó un resultado de 1,1 mg/l.

El conductor afirmó rotundamente ante el resultado que "venía de la fuente de coger agua fresquita" lo que invitó a los agentes a indagar más sobre las circunstancias de tan elevada tasa. Descubrieron que esta persona era reincidente y que ya había sido sorprendida en julio de 2018 y enero de 2019 conduciendo con una tasa de alcohol superior a la permitida.

La fuerza actúante consideró que tiene problemas de adicción al alcohol, por lo que se le propuso ante la Jefatura Provincial de Tráfico para una revisión psicofísica extraordinaria para determinar, si dicha Autoridad lo considera oportuno, ser sometido a una revisión extraordinaria por personal facultativo de los Centros habilitados para ello