Un kamikaze de 66 años que circulaba en dirección contraria por la A-6 falleció en el brutal accidente que causó al chocar frontalmente contra un Opel Astra en el que viajaba un matrimonio de Villalba y sus dos hijos mellizos de cuatro años de edad, que resultaron heridos, en las proximidades de la ciudad coruñesa de Betanzos.

El fallecido era el único ocupante de un Mercedes que poco antes había huido de otro siniestro -sólo con daños- en el estacionamiento de una vinoteca ubicada en la carretera N-VI y que recorrió cuatro kilómetros en sentido contrario por la autovía. El accidente se produjo a las 23.00 horas del sábado en el kilómetro 564.1 de la A-6 a su paso por la parroquia coruñesa de San Xulián de Coirós.

El aparatosos choque se produjo poco después del desvío de Oza y los vehículos siniestrados obstaculizaron la calzada, uno de ellos, el que iba en dirección opuesta al sentido de la autovía, quedó atravesado y el otro volcado tras recibir la embestida, según relató un testigo a los servicios de Emergencias. La colisión tuvo lugar en un tramo con curva a la derecha y el vial quedó cortado durante cuatro horas, si bien el tráfico fue derivado desde una zona del área de descanso, según información de la Guardia Civil.

Los heridos ocupaban el coche contra el que se empotró el kamikaze, que circulaba en sentido A Coruña por los carriles que van en dirección Lugo. Apareció de imprevisto en una curva, por lo que a conductora del Opel Astra no pudo evitar el brutal choque, y su marido que viajaba en el asiento del copiloto tuvo que ser excarcelado en estado su grave.

La mujer y sus dos hijos de 4 años, que fueron excarcelados por los bomberos con sus sillitas de retención, fueron trasladados a un centro sanitario, si bien en principio su vida no corre peligro. Los cuatro viajaban con los cinturones de seguridad puestos.

Apenas unos minutos antes de la colisión el 112 recibió la alerta de varios conductores que se cruzaron con un Mercedes que circulaba en sentido contrario por la A-6, varias patrullas de la Guardia Civil de Tráfico salieron a su encuentro pero no lograron evitar el siniestro.

El Mercedes del fallecido, un vecino de Irixoa, resultó con la parte frontal totalmente destrozada. Todo apunta a que el conductor no llevaba puesto el cinturón de seguridad. El turismo de la familia de Vilalba cayó por el desnivel de la mediana tras el impacto.