La muerte en soledad en el domicilio es un drama social que no solo afecta a las personas mayores. El cadáver de una mujer de 45 años ha sido hallado en un piso de la calle Lugo de Vigo, donde llevaba muerta entre tres y cuatro meses sin que nadie preguntara por ella.
Los vecinos del edificio habían detectado desde hace un mes un fuerte olor y una gran presencia de moscas e incluso gusanos en pasillos y escaleras. Los bomberos accedieron por fin el martes a uno de los pisos del inmueble y, tras localizar un cadáver en avanzado estado de descomposición, facilitaron la entrada a la Policía Nacional y a los médicos forenses.
La fallecida residía en un edificio de apartamentos donde muchos vecinos ni la conocían. A la espera del informe de la autopsia, que también certificará la identidad de la mujer, todo apunta que se trata de una muerte natural, pues no presentaba signos de violencia.
La Policía Nacional se ha hecho cargo de la investigación de este caso para conocer las circunstancias del suceso, mientras que las diligencias han pasado al Juzgado de Instrucción 1 de Vigo, en funciones de guardia. Los agentes interrogaron ya a varios vecinos y efectivos de la Policía Judicial examinaron la vivienda.
