El Tribunal Supremo se reunió ayer para estudiar la demanda de la familia de Isabel Fuentes, asesinada por su marido en el hospital de Ourense en mayo de 2015. Y ha decidido reabrir el expediente a la jueza que no puso el foco sobre el marido ni restringió las visitas, al no considerar el primer ataque en casa como violencia machista, en contra del criterio de la Guardia Civil. El alto tribunal estima así la demanda de la familia de la víctima.