Al menos tres personas fallecidas -dos bomberos y una española vecina de la localidad de Burguillos en Toledo- y casi medio centenar de heridos, entre los que figuran dos ciudadanos españoles, es el trágico balance de una fuerte explosión ocurrida ayer a las 9 de la mañana en una panadería en el centro de París.

Una fuga accidental de gas es la posible causa del siniestro, según informaron las autoridades. La mujer fallecida, de unos 30 años de edad, estaba de turismo en la capital francesa y se hospedaba en la zona donde se produjo el suceso. Su marido se trasladó de inmediato a Francia al conocer el accidente. El estado de los dos españoles heridos, un hombre y una mujer, no es grave aunque ambos se encuentran hospitalizados en el mismo centro, según el Ministerio de Asuntos Exteriores.

En la explosión, según la Policía gala, han muerto al menos dos bomberos que acudieron tras la alerta de un escape de gas en la panadería. El incendio tras la explosión llenó de humo las calles del centro de París y causó numerosos daños materiales en los edificios aledaños, entre ellos varios hoteles, cuyos clientes tuvieron que ser evacuados por razones seguridad. Una decena de los casi cincuenta heridos se encuentran en estado muy grave, por lo que el número de fallecidos podría incrementarse en las próximas horas.

La mujer fallecida, según el Digital de Castilla La Mancha, ha sido identificada como Laura S. Trabajaba en un supermercado del barrio de Santa Bárbara y residía en la actualidad en la localidad de Burguillos.

El presidente regional, Emiliano García-Page, expresó ayer por la tarde su "consternación" por los fallecidos. En su cuenta personal de Twitter, García-Page ha hecho alusión a la víctima manchega "de nuestra tierra, que visitaba la capital francesa". Y ha transmitido sus condolencias personales "y también en nombre del Gobierno de Castilla-La Mancha, a sus familiares, amigos y allegados".

La embajada española, según fuentes de Exteriores, se mantiene en contacto con las familias de los heridos y de la fallecida, y el consulado de España en París ha puesto a disposición de los afectados todos los medios a su alcance.

El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha trasladado sus condolencias a los familiares de la fallecida a través de su cuenta personal en Twitter, donde ha expresado su deseo de "una pronta recuperación" de los heridos.

Los bomberos de Madrid se han solidarizado en un tuit con el dolor de sus compañeros franceses y han manifestado sus condolencias en la red.

El suceso se produjo sobre las nueve de la mañana en la esquina de la calle de Treviso con la calle Santa Cecilia, cerca de la zona comercial y turística de los Grandes Bulevares.

Unos 270 bomberos y un centenar de policías fueron desplazados a la zona. La explosión, que se produjo alrededor de las 09.00 horas, provocó un enorme estruendo que hizo temblar ventanas de las viviendas cercanas y causó cerca de cincuenta heridos, una decena de ellos muy graves.

El accidente coincide con el noveno sábado de protestas convocado por los 'chalecos amarillos' que volvieron a sacar a las calles de Francia a decenas de miles de personas, que en algunos lugares como en París acabaron en refriegas esporádicas con la policía.