Las investigaciones iniciadas el mes pasado por la Policía Nacional tras recibir denuncias de familias de A Coruña cuyas hijas menores de edad habían sufrido tocamientos de un hombre cuando entraban en sus portales después de salir del colegio se han extendido en los últimos días hacia la identificación y localización de otro individuo, un segundo presunto acosador que aborda a las jóvenes proponiéndoles participar en una sesión de fotos. Las denuncias por el primer caso son en la actualidad más de doce, la cifra acumulada a mediados de diciembre, y las del segundo alrededor de media docena, según fuentes policiales consultadas.

La Brigada de la Policía Judicial y la Unidad de Familia y Mujer hacen pesquisas en los dos sentidos con las descripciones facilitadas por las víctimas, pero todavía no han identificado a ningún sospechoso. El hombre que hace tocamientos a las menores es, según los denunciantes, de entre 40 y 45 años, de alrededor de 1,75 metros de estatura, tiene cabello corto y usa gafas de forma ocasional; hasta ahora ha actuado en los barrios coruñeses de Monte Alto, As Atochas y Juan Flórez. El segundo sospechoso de acoso es, de acuerdo con las descripciones, de mayor edad que el otro y ha contactado con las niñas en las zonas de Elviña, Birloque y Cuatro Caminos.

Los policías trabajan, por tanto, con distintos perfiles y modus operandi. El autor de los tocamientos suele acercarse a menores de entre 13 y 16 años por las tardes, las manosea al entrar con ellas en el portal de sus casas y a continuación se marcha a toda prisa y corriendo. El otro hombre se dirige a las jóvenes en plena calle para hacerles una consulta y aprovecha para preguntarles también si quieren hacer una sesión fotográfica, a lo que las denunciantes se han negado.

Este procedimiento de acoso es el que empleó el sospechoso con una joven el mes pasado en la calle Santo Tomás, en Monte Alto, de lo que alertó a través de un vídeo que colgó en las redes sociales, si bien ese hombre además la agarró por un brazo con intención de retenerla antes de que ella se zafase. Desde la asociación vecinal del barrio de Os Rosales también se ha alertado estos días por redes sociales de que otro hombre, más joven, preguntó a una menor si era mayor de edad y de inmediato le propuso hacerse unas fotografías; la chica rechazó la idea y el joven se marchó.

Los investigadores de la Policía Nacional han puesto en marcha, desde las primeras denuncias, dispositivos para intentar localizar a los individuos. Colegios de algún entorno afectado por este caso, como el barrio de Monte Alto, también han tomado precauciones para prevenir nuevos incidentes, al informar de lo ocurrido a los padres y madres de sus alumnos para que extremen la vigilancia sobre sus hijos cuando acudan al centro o terminen sus clases.