"¡Hola¡ Realizo encargos de ilustración, pintura y diseño¡" Con esta frase se presentaba la joven profesora Laura Luelmo en Twitter. Unas palabras que reflejaban la pasión por el arte de una mujer viajera, alegre, estudiosa y comprometida, como recuerdan ahora, rotos por el dolor, familiares y compañeros de trabajo de esta zamorana de 26 años amante del dibujo y la ilustración.

Hija de padres funcionarios, él ingeniero agrónomo en Agricultura de la Junta de Castilla y León en Zamora recién jubilado y ella trabajadora en el servicio de Empleo, Laura hizo Bellas Artes en la Universidad de Salamanca y descubrió sus dotes como caricaturista y retratista. La vocación por el dibujo la llevó a cubrir la plaza de profesora de Plástica en el instituto de Nerva (Huelva) al que se incorporó este diciembre.

En su etapa de estudios participó en un intercambio con la universidad mexicana de las Américas de Puebla y compatibilizar sus dos pasiones: la pintura y viajar. Tras concluir la Universidad, Laura continuó su formación en otros lugares como Valencia, donde hizo un máster para especializarse como profesora de Secundaria y Bachillerato en dibujo.

Su último mensaje en Twitter fue con motivo del Día Internacional de la Mujer, el 8-M, en el que colgó una ilustración suya con el lema: "Tu proyecto eres tú". Antes ya había dejado constancia de su compromiso con la igualdad y contra la violencia machista con otros mensajes.

La profesora también recaló para completar su formación en Madrid, donde cursó un máster en diseño y hace dos años mostró su habilidad como caricaturista en unas jornadas en la Biblioteca Nacional. Tras realizar trabajos como ilustradora, diseñadora y fotógrafa, se orientó a la docencia. Aprobó las oposiciones, pero sin plaza.

En un colegio de Zamora cubría una baja hasta que hace unos semanas la llamaron para la vacante en Huelva. Pese a que estaría lejos de su familia y su novio, piloto de motocross, aceptó marcharse a más de 500 kilómetros de distancia de su ciudad. Su nueva etapa, lamentablemente, tuvo un trágico final.