Efectivos de Protección Civil de Portugal ya han recatado los cuerpos de las cuatro personas, entre ellas un médico gallego, que fallecieron anoche tras estrellarse el helicóptero sanitario en el que viajaban cerca de Oporto. Según informó hoy a EFE Protección Civil, los trabajos de rescate se demoraron varias horas porque el helicóptero se estrelló en una zona montañosa de difícil acceso.

Los cuerpos de las víctimas, según las mismas fuentes, fueron trasladados hasta el Instituto de Medicina Legal de Oporto. El helicóptero, ocupado por el médico gallego, una enfermera y dos tripulantes -los tres portugueses-, se estrelló este sábado en la comarca de Valongo -a 15 kilómetros de Oporto- cuando regresaba de atender una emergencia de la ciudad de Bragança.

El fallecido español es Luis Vega, un médico de 47 años, natural de A Coruña, que trabajaba en el Hospital São Sebastião de la ciudad de Santa Maria da Feira (próxima a Oporto) desde hace 19 años. Estaba adscrito al servicio de urgencias del hospital y formaba parte del Instituto Nacional de Emergencia Médica (INEM) de Portugal. Fuentes diplomáticas españolas confirmaron que su familia ha sido informada del accidente y ha viajado a Oporto para retirar el cuerpo y trasladarlo a España.

El Gabinete de Prevención e Investigación de Accidentes con Aeronaves y de Accidentes Ferroviarios (GPIAFF), explicó hoy en un comunicado que, tras analizar los restos de la aeronave sobre el terreno, todo indica que colisionó contra una antena emisora en la zona. El ministro de Administración Interna luso, Eduardo Cabrita, ordenó a la Autoridad Nacional de Protección Civil una investigación urgente sobre los mecanismos y las comunicaciones que se activaron tras el siniestro.

La decisión del Gobierno coincide con la difusión de una carta del organismo de navegación aérea de Portugal (NAV) en la que afirma que alertó a las autoridades de Protección Civil y a la Fuerza Aérea de la desaparición del helicóptero tras intentar contactar infructuosamente con los comandos de operaciones de socorro de Oporto, Braga y Vila Real, que "no contestaron". NAV Portugal sostiene, en la carta que ha sido divulgada por medios locales, que actuó "con diligencia y celeridad" y "cumpliendo los procedimientos establecidos para este tipo de situaciones" tras perder el contacto con la aeronave, un HSU203.

El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, envío hoy sus condolencias a las familias y adelantó que coordinará con el Gobierno un "justo homenaje" para los fallecidos. "Es especialmente trágico que estos héroes de las emergencias médicas, que pasaban sus días para salvar a enfermos y víctimas de accidentes, hayan ellos mismos muerto de esta forma", manifestó el presidente.

También el primer ministro, António Costa, lamentó la tragedia y transmitió sus condolencias a las familias. Desde su creación, en 1997, este ha sido el primer accidente grave del INEM en Portugal, que ha realizado 16.370 servicios de transporte en helicóptero.