La búsqueda del pequeño Arthur Robinson, el último desaparecido durante las inundaciones del Llevant (Mallorca), concluyó ayer al hallarse el cuerpo sin vida del pequeño junto al torrente de ses Planes, a escasos metros de la rotonda donde su madre que también falleció, Joana Lliteras, logró sacar a su otra hija del vehículo al verse sorprendida por la riada.

El cádaver fue localizado por un particular que hacía tareas de limpieza. Avisó a los servicios de emergencia de Guardia Civil y Unidad Militar de Emergencias (UME) que seguían buscando al menor, de 5 años, en el torrente después de una semana desaparecido.

Con el hallazgo del pequeño son 13 las víctimas mortales, incluida la madre de Arthur, por las que se ofició ayer un multitudinario funeral encabezado por los Reyes. En la riada, el mayor desastre natural de la historia reciente de Mallorca, fallecieron siete españoles, tres alemanes, dos británicos y una holandesa. A la misa asistieron también la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo; la presidenta del Govern balear, Francina Armengol; el presidente del Parlament autonómico, Baltasar Picornell; los alcaldes de los municipios afectados, decenas de otras autoridades autonómicas e insulares, la portavoz del PP en el Congreso, Dolors Montserrat, y el líder de Ciudadanos, Albert Rivera. También acudieron miembros de los servicios de emergencia.