El juicio contra cinco agentes de la Policía Local de Vigo acusados de dar una paliza a un joven en el momento de su detención en plena calle dio ayer un vuelco importante al retirar el fiscal las acusaciones contra cuatro de los policías.

En su escrito de acusación inicial el Ministerio Público solicitaba penas de año y medio de prisión para cada uno de los agentes y otros tres años de inhabilitación de empleo público, pero a la conclusión de la vista oral ayer decidió retirar los cargos a cuatro de los policías. Y es que consideró que no se habían extralimitado en sus funciones tras escuchar las versiones en la sala de Penal 3, donde se celebraba la vista oral, de los propios agentes, del arrestado -que compartía banquillo por un delito de resistencia a la autoridad- y de los peritos que comparecieron.

La Fiscalía mantuvo su petición de año y medio de prisión y 3 de inhabilitación para el único agente acusado, a la vez que solicita que indemnice al joven arrestado en 210 euros por las lesiones y otra cantidad por los daños morales.

El Ministerio Público mantuvo también los cargos contra el joven detenido y solicitó que sea condenado a multas que suman 2.475 euros por un delito de resistencia a la autoridad y otro de lesiones leves al policía al que golpeó y a quien debe indemnizar en 90 euros.

Los hechos juzgados ayer tuvieron lugar sobre las 3 de la madrugada del 19 de enero de 2017. El acusado A.B.M. se encontraba en el exterior de un establecimiento de ocio en Vigo cuando acudieron dos patrullas de la Policía Local, requeridos por varios vecinos que se quejaban del ruido. Tres de los cuatros agentes accedieron al interior del local, mientras el cuarto se quedó en uno de los vehículos.

Entonces A.B.M., sin darse cuenta de la presencia del policía, se acercó al vehículo y orinó sobre él. Cuando vio al agente bajarse del coche, huyó pero fue perseguido. Cuando el policía le sujetó por detrás, según el escrito fiscal, el joven braceó y para intentar zafarse le propinó varios puñetazos que le alcanzaron en el brazo y otro en la cabeza, causándole lesiones leves.

En ese momento se acercaron los demás policías locales, a quienes inicialmente acusaba de haberle propinado una paliza con golpes y patadas mientras estaba en el suelo. Extremo que no se ha probado en el juicio.