Un terremoto de magnitud 7 provocó ayer al menos 82 muertos en la turística isla de Lombok y causó daños materiales que también afectaron a la vecina isla de Bali, ambas en la región central de Indonesia.

El jefe regional de la Agencia de Gestión de Desastres, Mohammad Rum, aseveró que algunas víctimas fallecieron en el acto debido en algunos casos a derrumbes en edificios y otras expiraron en el hospital, según medios locales.

El temblor, cuyo hipocentro se situó a diez metros de profundidad, se produjo una semana después de otro seísmo que causó 16 muertos y más de 300 heridos en la misma Lombok.

Uno de los fallecidos ayer fue un estudiante de 14 años aplastado por los escombros que cayeron en la escuela islámica en la que se encontraba rezando. El ministro de Interior singapurés, K. Shanmugan, que se encuentra en Mataram, afirmó que hubo escenas de pánico y daños en el hotel donde se hospeda.

La isla de Lombok, dominada por el volcán Rinjani, se encuentra al este de Bali, principal destino turístico de Indonesia.