El juicio contra el joven de 24 años de edad, Brais V.N., que en septiembre de 2016 causó un grave accidente mortal cuando conducía , según el fiscal, ebrio y a 199 kilómetros por hora en un tramo limitado a 50, ha tenido que aplazarse por segunda vez. Si el pasado mes de mayo se aplazó por un problema con las citaciones a consecuencia de la huelga de funcionarios judiciales, ayer estaban todos los testigos pero faltaba el médico forense que llevó el caso. Y es que la vista se fijó coincidiendo con sus vacaciones, según explicaron varios abogados a sus clientes.

En el siniestro falleció uno de los ocupantes del vehículos y otros cuatro, incluido el conductor, resultaron heridos. Brais V.N. se enfrenta a penas que suman cuatro años de prisión y a seis de pérdida del carné de conducir. El Ministerio Púbico le atribuye la comisión de seis delitos: uno de conducción temeraria -que absorbe la velocidad excesiva-, otro de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, otro de homicidio por imprudencia grave y tres más de lesiones, una pro cada uno de los heridos.

La Fiscalía solicita, además, indemnizaciones que superan los 238.000 euros para la pareja, los padres y el hermano del joven fallecido en el siniestro. Todos ellos se encontraban ayer en los pasillos de los juzgados de Vigo a la espera de que comenzara la vista oral. Ahora tendrá que esperar a ver si se celebrar a la tercera: el 20 de julio.