La joven Tatiana Vázquez recibió en total 54 puñaladas en el interior de su vehículo en Lugo, aunque la cuchillada mortal le fue asestada en el bazo y motivó que se desangrase. Así lo han confirmado este jueves durante su declaración judicial los forenses, que han determinado que el fallecimiento se produjo entre las 4,50 y las 7,50 horas de aquella madrugada, tiempo después de que una cámara la grabase saliendo de una pensión en compañía del único acusado.

Durante la sesión de este jueves del juicio que se sigue contra el que fuera pareja de la joven, Ibrahima N., los forenses han revelado que Tatiana recibió 54 cuchilladas, aunque el arma del crimen no ha aparecido. De ellas, tres fueron en el cuello, 33 en el tronco y abdomen y el resto en las manos y antebrazo (17), estas últimas "heridas de defensa" en un intento por "protegerse".

Los forenses han incidido en esta declaración que la "longitud mínima" del arma blanca empleada era de "once centímetros", con cuchilladas de entre 3,5 y más de cuatro centímetros.

Las heridas mortales, sin embargo, se produjeron en "el bazo", algo que provoca "que la persona se desangre por dentro". El forense ha indicado que la cuchillada mortal fue "la número 23". "La que la mató", ha sentenciado, en tanto que ha explicado que las que aparecieron en el cuello probablemente tuvieran un carácter "intimidatorio".

A causa de este ataque, la joven se "desangró" tras perder "más de litro y medio de sangre". El ataque, han confirmado, se produjo "entre las 4.50 de la madrugada y las 7,50 horas" de ese nueve de abril de 2016.

Los técnicos de ADN, por su parte, corroboraron que los vestigios hallados en una toalla hallada en la habitación de la pensión en la que residía Ibrahima son del acusado y de la víctima, sin poder concretar más.

Saliendo juntos del hostal

Por videoconferencia, los agentes de Policía encargados de "plasmar gráficamente" las informaciones han confirmado que en los vídeos de las distintas cámaras que se visionaron ese día se ve a la pareja salir del hostal de San Roque pasadas las 4.07 horas de la madrugada.

En estas imágenes, han apuntado, se observa que ambos entran en el vehículo de ella, luego de, probablemente, haber "mantenido una discusión".

Durante la sesión, el abogado del acusado, César Lodos, ha insistido en que la acusación se sostiene sobre "indicios", censurando que no se "exploraran" otras vías. "A poco más que hubieran investigado podría haber otros posibles culpables sentados en el banquillo, pero no lo han hecho", ha reprochado.

Por su parte, el letrado que representa a la familia de Tatiana, Pablo Freire, ha considerado que esos indicios vendrían "a ser como una especie de puzzle, donde todas las piezas encajan". "La policía ha hecho un buen trabajo", ha destacado.

"Indignado con la Policía"

El acusado del crimen ha llegado a los juzgados clamando contra los investigadores y expresando que está "indignado con la Policía, con las mentiras". "Indignado con la policía", ha repetido, antes de entrar en el palacio de la Audiencia.

Poco después entraba también en el edificio judicial la desconsolada familia de la víctima. La madre, Manuela Abuín, ha dicho que están viendo "bastante bien" el juicio, y ha reiterado que el responsable del crimen es "Ibrahima".